Abrir una cuenta bancaria en el Mashreq Bank, puede resultar una verdadera pesadilla…
Invertir o abrir una cuenta bancaria en el Mashreq Bank con sede en Dubai, puede resultar una verdadera pesadilla para los empresarios extranjeros y terminar envuelto en un fraude por parte del vicepresidente de Negocios Bancarios y gerente de Relaciones, Ahmed Bilal Sheikh, de la sucursal de Sharjah, institución que pese a su larga trayectoria y experiencia que pregona y su slogan de aniversario “50 años haciendo lo posible”, lo único posible en dicha entidad bancaria es salir timado por los mismos ejecutivos que se aprovechan de las leyes discriminatorias existentes en los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y que no ofrece ninguna garantía a los inversionistas que deciden llevar sus ahorros a este paraíso fiscal.
Hace un año un importante cliente decide confiar una cuantiosa suma en divisa EUR al Mashreq Bank; al principio el trato parecía amable y atento, sin embargo, de un día para otro, sin explicaciones y sin asumir ninguna responsabilidad, el banco decide finalizar la relación comercial con una de las empresas del inversionista y cancelar todas sus cuentas.
En una maniobra sospechosa y unilateral, el banco le da escasos siete días para que pueda mover los fondos -tiempo insuficiente para abrir otra cuenta corporativa-, sin dar mayor información sobre las razones que derivaron la anulación del contrato, por lo que en repetidas ocasiones solicita ampliar el plazo, encontrando siempre negligencia, desidia y cerrazón por parte de Ahmed Bilal Sheikh.
Luchando siempre contra reloj, el afectado solicita una transferencia, pero le informan que ésta solo procede en AED a cuenta en Emiratos Árabes Unidos, y no en EUR como estaba pactado desde un inicio, o en su defecto emitir un cheque bancario por el importe total en EUR, ya que el banco arbitrariamente modificó los términos.
Como era de esperarse, conseguir el cheque fue todo un calvario, y tras pasar una serie de peripecias, los conchudos ejecutivos vuelven a cambiar los términos argumentando que la única forma de entregarle su dinero, ya sea por cheque o transferencia, era en la divisa AED. El cambio, por el importe que acreditaba una cuantiosa suma, implicaba también el cargo de una jugosa comisión, donde el único beneficiario sería el deshonesto banco y en consecuencia el corrupto directivo Ahmed Bilal Sheikh que, en todo momento, cuando los perjudicados podían hablar con él -ya que siempre se escondía en una actitud cobarde-, les brindó un trato déspota y denigrante.
No obstante, el envilecido empleado bancario lo único que buscaba era ganar tiempo para poder sacar más dinero, ya que por conseguir la operación de una divisa más elevada obtendría una buena comisión del banco y su tarea era presionar a los clientes para que aceptaran el cambio con la mentira que Mashreq Bank lo procesaría automáticamente a un tipo de cambio muy inferior, al cumplirse los siete días que había estipulado como fecha fatídica.
Una vez que los sinvergüenzas lograron el cambio de moneda, vendría la estocada final: no les permitían realizar la transferencia si no era con un cheque bancario y en la divisa AED, lo que resultó una odisea encontrar un banco en los Emiratos Árabes Unidos para abrir una cuenta a nombre de la empresa e ingresar el cheque.
Quizá con estas acciones de abuso por parte de instituciones como Mashreq Bank, el sector financiero de Dubái quiera replicar la crisis de 2008, cuando los grandes capitales privados, que se habían intensificado con la expectativa de una revalorización del Dírham frente al Dólar estadounidense, se retiraron de manera abrupta, con un consecuente deterioro en la actividad económica de los Emiratos Árabes Unidos.
Se sabe que estas prácticas son sistemáticas de algunos ejecutivos bancarios como Ahmed Bilal Sheikh, que usa su posición para sacar ventaja económica, y lo cual debería ser del conocimiento de sus jefes superiores como el presidente Ahmed Al Yousef o el CEO Abdul Aziz Al Ghurair, para que le pongan un alto a estos vivales. Y las cosas se les podría complicar porque la agencia de calificación de riesgo Standard & Poors (S&P) apenas el año pasado rebajó de positiva a estable su perspectiva para Mashreq Bank, al confirmar su rango crediticio de BBB a largo plazo para dicha entidad bancaria.